sábado, 10 de enero de 2015

DOMINGO DEL
BAUTISMO
 DEL SEÑOR

Evangelio Mc 1, 6b-11
En aquel tiempo proclamaba Juan: -Detrás de mí viene el que puede más que yo, y yo no merezco ni agacharme para desatarle las sandalias. Yo os he bautizado con agua, pero él os bautizará con Espíritu Santo.
Por entonces llegó Jesús desde Nazaret de Galilea a que Juan lo bautizara en el Jordán. Apenas salió del agua, vio rasgarse el cielo y al Espíritu bajar hacia él como una paloma. Se oyó una voz del cielo: -Tú eres mi Hijo amado, mi preferido.
Reflexión

Presentación "oficial" de Jesús en público

La fiesta del Bautismo del Señor, que hoy celebramos, cierra el ciclo litúrgico de Navidad. Hemos contemplado y celebrado el gran misterio de Dios que se hace hombre y nace en medio de nosotros. La fiesta del Bautismo del Señor es como LA CONCLUSIÓN de la Navidad. Es la proclamación pública de lo que significa Jesús. Es otra “epifanía”, es decir, otra manifestación de Jesús. El Padre y el Espíritu se hacen presentes en el Jordán  y nos revelan que Jesús es el Hijo de Dios, la palabra que Dios tiene que decir a los hombres.

¿Quién es Jesús?:

Antes de comenzar su vida pública, Jesús acude a ser bautizado por Juan, en el río Jordán. Jesús no recibe este bautismo porque lo necesite. Con este hecho hace suyo el gesto del Siervo de Yahvé, profeta solidario que carga sobre sí los pecados del mundo. En El Bautismo de Jesús,  en primer lugar, se nos manifiesta que Jesús es el Hijo amado de Dios, el Mesías Ungido por el Espíritu Santo: Es la Palabra de Dios que habita ya entre nosotros. Es el Mesías, esperado por el Pueblo de Israel,  que ya ha llegado; que está en la fila de los hombres

¿Cómo es Jesús?:

En segundo lugar, en el Bautismo de Jesús se nos manifiesta el modo de ser Mesías. Su estilo no será el de la fuerza y el poderío, sino el estilo del siervo de Yahvé, que había anunciado Isaías (primera lectura): no gritará, no clamará, no voceará por las calles, traerá una nueva justicia al mundo. Estará cerca de los que se sienten rotos como cañas cascadas, apoyara a los que andan vacilantes, como velas temblorosas. Su estilo será el de Siervo: servir. Así es como lo anuncia Isaías. Y así es como también hemos escuchado que retrata a Jesús su discípulo Pedro:"Jesús de Nazaret, ungido por Dios con la fuerza del Espíritu Santo, que pasó haciendo el bien y curando a los oprimidos por el diablo porque Dios estaba con él..."
Seguir a Jesús y de este modo

Cada uno de nosotros, por el bautismo somos “injertados” en Cristo. También somos ungidos y escuchamos las mismas palabras del Padre. El Espíritu hoy nos envía al mundo a evangelizar a los pobres, a proclamar a los cautivos la libertad. A este Hijo es al que hemos de seguir. A este Cristo es al que nosotros nos hemos unido por el Bautismo y eso significa dos cosas:

Primera: Que ese Hijo, el Amado del Padre, es el que trae la salvación. Que Él es el único Salvador de nuestras vidas rotas como cañas, vacilantes como velas, machacadas por la dureza de la vida y de la muerte. No hay otro nombre del que podamos esperar la salvación. A Él estamos unidos por nuestro Bautismo y a Él hemos mirar, escuchar y seguir.

Segunda: mirar, escuchar y seguir al Hijo Amado, significa también que, unidos a Él por el Bautismo, estamos llamados como Él a ser anunciadores de la salvación de Dios y hemos de hacerlo con su estilo: el del siervo. Siendo pacientes con los que vacilan, dando ánimos y apoyando a los que se encuentran rotos. Luchando por una justicia nueva en el mundo. Despojándonos de nuestros rangos, haciéndonos como Él humildes, pequeños, servidores, uno de tantos, acercándonos y poniéndonos en la fila de los hombres y mujeres, y a su servicio. Para ello también nosotros recibimos la fuerza del Espíritu Santo, que descendió sobre nosotros en nuestro Bautismo

Éste es mi Hijo, el amado, mi predilecto” nos dice la voz del cielo. Éste, y de ese modo. Pidamos hoy a Dios que nos ayude a reconocer a Jesús como el Mesías, Hijo de Dios, único Salvador.  Y a seguirle siendo como Él, viviendo como Él.
Secundino Martínez Rubio

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